Después de preparar el cumpleaños de mi princesa, me he animado con esto de la repostería y el domingo nos metimos los tres (la princesa, su papá y su mamá) en la cocina para hacer galletas. Nuestras primeras galletas.
Una vez horneadas y enfriadas nos pusimos a decorarlas. Como no hemos hecho nunca repostería pues no tenemos herramientas adecuadas para adornar, así que nos las ingeniamos con unas jeringuillas, sí, sí, de esas de las vacunas o de suministrar los jarabes a los peques, jajaja.
Pero después de un ratillo la glasa se nos empezaba a endurecer y no la podíamos meter en las jeringuillas (se nota que nunca habíamos hecho glasa, ¿verdad?), así que mi marido nos preparó una improvisada manga pastelera con una bolsa de plástico haciéndole un minúsculo agujerito por donde salía la glasa.
Las decoraciones son siempre iguales: rosa y blanco, porque son las que teníamos en casa y que habían sobrado del cumple de la princesa. Pero añadimos chocolate en gotas que también teníamos.
Nos lo pasamos genial los tres, nos reímos muchísimo y aunque la decoración de las galletas deja mucho que desear, tengo que deciros que están más que buenas, riquísimas, deliciosas y no tienen nada que envidiarle a las galletas holandesas, esas de la lata azul. Bueno, vale, sí tienen una cosa que envidiarles: el aspecto, jeje, pero solo eso.
Y esta es la receta que seguimos, sacada de aquí, aunque modificada un poco a nuestra conveniencia. Nosotros las hicimos con thermomix, pero se puede hacer sin ella, solo con la batidora.
♥ Galletas Caseras ♥
Ingredientes para la masa:
120 gr de azúcar glas
400 gr de harina
240 gr de mantequilla a temperatura ambiente en trozos
1 huevo
Ingredientes para la decoración o glasa:
1 clara de huevo
200 gr de azúcar glas
Unas gotas de zumo de limón
Colorante alimentario rosa
Preparación:
Ponemos todos los ingredientes de la masa en el vaso thermomix y programamos 30 segundos velocidad 6. Sacamos la masa, la envolvemos en film transparente y la metemos en el congelador durante 15 minutos. Pasado este tiempo la sacamos del congelador y la partimos en dos, una mitad la metemos en el frigorífico envuelta en film y la otra mitad la estiramos sobre la superficie de trabajo previamente espolvoreada de harina para que no se nos quede pegada. La estiramos con la ayuda de un rodillo (o con una botella como hicimos nosotros que no tenemos rodillo) dejándola con un espesor de medio centímetro más o menos.
Ahora cortamos la masa con cortapastas de diferentes formas y las vamos poniendo en la bandeja del horno forrada con papel de hornear. Las horneamos a 180ºC durante unos 12 minutos aproximadamente. Cuidado no las dejéis demasiado tiempo, que no se doran, se quedan blanquitas, como esperéis a que se doren se queman, como casi nos pasa a nosotros con la primera tanda.
Una vez horneadas hacemos lo mismo con la otra mitad de masa que teníamos en el frigo.
Cuando ya estén frías las galletas las empezamos a adornar, para ello hacemos una glasa de esta manera:
Ponemos en el vaso thermomix la clara de huevo, el azúcar glas y las gotas de limón y programamos 20 segundos velocidad 6. Vertemos el glaseado en dos boles y teñimos de rosa uno de ellos. El otro lo dejamos en blanco (se le puede echar el colorante que se quiera, yo como sólo tenía rosa...).
Y ya podemos adornarlas como queramos y/o podamos, jeje.
Y aquí mi princesa decorando sus galletas bajo la atenta mirada de Papelote (el gato ese enorme que veis), la mascota de su clase, que este fin de semana lo ha pasado con nosotros en casa.
Así pasamos nuestra tarde de domingo en familia. Simplemente genial. Y las galletas de rechupete.
Y a vosotr@s ¿os gustan las galletas?
Besitos,